Las entrevistas de trabajo tienen un objetivo claro: conocer mejor al candidato o candidata y determinar si es adecuado para el puesto. Aunque muchas preguntas son estándar y previsibles, algunas pueden ser preguntas trampa y presentar un desafío adicional. Estas preguntas están diseñadas para evaluar tu profesionalidad, tu actitud y cómo manejas situaciones difíciles.
En este artículo veremos cómo identificar las preguntas trampa más comunes y cómo responderlas de manera efectiva para destacar en tu próxima entrevista.
Tipos de preguntas trampa
Preguntas negativas
Estas preguntas están pensadas para incitarte a criticar o hablar negativamente sobre algo o alguien, lo que podría hacer que parecieses menos profesional o con tendencia a la crítica. Estos son algunos ejemplos:
- ¿Cuál ha sido el peor jefe que has tenido?
- ¿A qué empresa no volverías nunca?
- ¿Qué es lo que menos te gusta de tu trabajo?
- ¿Has tenido malas experiencias trabajando en equipo?
Cuando calificas a otras personas con adjetivos negativos, esos atributos pueden asociarse más contigo que con la persona que intentas describir. Este fenómeno se conoce como “transferencia espontánea de rasgos”. En lugar de centrarte en la parte negativa o evitar responder, es mejor redirigir la pregunta hacia algo positivo.
Ejemplo de respuesta positiva
“En todos mis trabajos he aprendido algo valioso. Aunque hubo desafíos, siempre me concentré en mejorar mis habilidades y buscar soluciones constructivas. Por ejemplo, en mi último trabajo aprendí la importancia de la comunicación efectiva y cómo puede mejorar el ambiente laboral.”
Preguntas proyectivas
Estas preguntas buscan conocer tus verdaderos deseos, objetivos y determinar si realmente te interesa el empleo a largo plazo. Algunos ejemplos son:
- ¿Cómo es para ti la empresa ideal?
- ¿Qué es lo más parecido a una mentira en tu CV?
- Si te tocara la lotería, ¿qué harías?
- Si te ofrecieran más dinero en otra empresa, ¿te irías?
Estas preguntas requieren que te enfoques en el presente y en tus objetivos actuales, mostrando tu interés en la empresa y el puesto.
Ejemplo de respuesta enfocada
“Para mí, la empresa ideal es aquella que permite a sus trabajadores y trabajadoras desarrollarse profesional y personalmente. He investigado sobre su empresa y sé que tienen programas de formación interna y un ambiente laboral colaborativo, lo cual se alinea con lo que busco.”
Preguntas justificativas
Estas preguntas están diseñadas para que justifiques huecos en tu currículum o movimientos profesionales que puedan parecer inconsistentes. Ejemplos incluyen:
- ¿Por qué dejaste tu último empleo?
- ¿Qué hiciste ese año que no aparece en tu CV?
- ¿Por qué quieres cambiar de sector?
Para responder a estas preguntas, es importante entender tus propios motivos y haber ensayado con anticipación cómo explicarlos de manera positiva.
Ejemplo de respuesta justificada
“Dejé mi último empleo porque buscaba nuevas oportunidades de crecimiento que no estaban disponibles en mi anterior empresa. Durante el año en blanco de mi CV, me dediqué a mejorar mis habilidades a través de cursos y voluntariados que me han preparado mejor para este puesto.”
Cómo enfrentarte a las preguntas trampa
En las entrevista de trabajo, responde siempre de manera sincera intentando centrarte en los valores, proyectos o políticas laborales que te interesan y que la empresa ofrece. A continuación, veremos algunas estrategias para enfrentarte a preguntas trampa de manera efectiva.
Investiga a fondo la empresa
Antes de la entrevista, investiga la empresa, sus políticas y valores. Comprender el entorno en el que te gustaría trabajar te permitirá dar respuestas más acertadas y alineadas con lo que la empresa busca.
En plataformas como Computrabajo, puedes leer las reseñas de empleados y empleadas actuales y anteriores para obtener una visión real de la cultura empresarial. Usa esta información para formular respuestas que muestren tu interés genuino en la empresa.
Tómate tu tiempo para responder
No temas tomarte unos segundos para pensar antes de responder. Un breve silencio puede ayudarte a formular una respuesta más coherente y detallada. Si necesitas tiempo, dile al reclutador que estás pensando para dar la mejor respuesta posible.
Si te enfrentas a una pregunta sobre la que debas reflexionar, podrías decir algo como:
“Esa es una excelente pregunta. Permítame un momento para pensar en la mejor manera de responderle.”
Mantén la positividad
Siempre que respondas a una pregunta negativa, intenta redirigirla hacia una respuesta positiva que destaque tus habilidades y actitudes constructivas.
Por ejemplo:
“En lugar de enfocarme en lo negativo, me gusta pensar en cómo puedo aprender y crecer a partir de las experiencias. Cada reto me ha enseñado algo nuevo y me ha ayudado a mejorar como profesional.”
Importancia de la entrevista para candidatos y candidatas
Recuerda que la entrevista también es una oportunidad para que tú conozcas mejor a la empresa y las personas que trabajan en ella. Presta atención a cómo te sientes durante el proceso y si percibes alguna red flag.
Preguntas que debes hacerte:
- ¿Te sientes a gusto durante el proceso?
- ¿Puedes responder tranquilamente?
- ¿Sientes que te están juzgando?
- ¿Te dan información clara sobre los siguientes pasos?
Todo lo que vivas en esas conversaciones te aportará conocimiento y te permitirá saber si realmente ese lugar es para ti o si es mejor seguir buscando.
Reflexión posterior a la entrevista
Después de la entrevista, reflexiona sobre lo que has sentido y observado. Escribe tus impresiones sobre lo que te ha parecido bien y lo que no. Esta reflexión te ayudará a evaluar si la empresa es la adecuada para ti y a mejorar tus respuestas para futuras entrevistas.
Ejemplo de reflexión
“Durante la entrevista, sentí que se me valoró y las preguntas fueron justas y claras. Sin embargo, noté cierta falta de claridad en las oportunidades de crecimiento, lo cual es importante para mí.”
Responder a preguntas trampa en una entrevista de trabajo puede ser un desafío, pero con preparación y una actitud positiva, puedes convertir estas preguntas en oportunidades para destacar tus fortalezas y demostrar tu idoneidad para el puesto.
Investiga a fondo la empresa, toma tu tiempo para responder, y mantén siempre una actitud constructiva y positiva. Recuerda que la entrevista es una oportunidad para ambas partes implicadas: tanto para la empresa como para ti.
Usa esta oportunidad para mostrar tu mejor versión y para evaluar si la empresa es el lugar adecuado para tu desarrollo profesional.